Unidad y movilización: Edilberto Centeno detalla el nuevo acuerdo laboral para empleados públicos de Bogotá

En una ciudad donde los desafíos laborales son crecientes, Edilberto Centeno Castro, joven líder sindical y secretario general del SUNET Bogotá y del CEDESIP, celebra la reciente firma del acuerdo laboral con la Alcaldía de Bogotá. En esta entrevista, “Beto” nos comparte cómo la unidad sindical y la movilización fueron claves para mejorar las condiciones de cerca de 59 mil empleados públicos del Distrito y deja un mensaje claro a la juventud trabajadora.
CEDESIP: Buenos días, Beto, le decimos como lo conocen todos en el mundo del trabajo. Gracias por tomarse un rato para esta entrevista. Vimos que celebró la firma del acuerdo laboral con la Alcaldía de Bogotá. ¿Quiénes negociaron y cómo se siente al lograr este acuerdo?
Beto Centeno: Me siento satisfecho, La negociación del Distrito Capital es de carácter territorial y allí presentan pliegos de peticiones las subdirectivas de centrales obreras y federaciones estatales. En esta oportunidad , estuvimos presentes la CUT, la CTC, la CGT, y sus federaciones; Fenaltraesp, Propaís y Únete; y CAT – Fedeasonal, y en cumplimiento del Decreto 243 de 202, nos reunimos para acordar un pliego único, definir criterios de participación, mecanismos de toma de decisiones y en común acuerdo, conformamos la Bancada Sindical Unificada con la que comenzamos la negociación con la administración.
Aunque hubo tensiones, especialmente en lo salarial, el diálogo fue respetuoso. Tras 40 días, logramos un buen acuerdo para los empleados públicos del Distrito.
CEDESIP: ¿Balance positivo?
Beto Centeno: Así es, el acuerdo laboral es muy positivo, principalmente porque demuestra que luchar da resultados. Todos los derechos que la clase trabajadora ha conquistado han sido fruto de la lucha, y este caso no es la excepción. Además, destaco la coordinación y unidad de la Bancada Sindical. A pesar de nuestras diferencias, supimos manejarlas democráticamente para alcanzar el objetivo principal: garantizar nuevos derechos para los empleados públicos del Distrito Capital.
CEDESIP: Beto, para los trabajadores de Bogotá, ¿puede contarnos qué se logró y a quiénes beneficia?
Beto Centeno: El acuerdo abarca 34 puntos sobre política laboral, bienestar, garantías sindicales, seguridad y política salarial. Beneficia a cerca de 59 mil empleados públicos del Distrito, con un incremento salarial para unos 25,000 no docentes. Dos puntos estructurales sobresalen: un aumento salarial de IPC + 1,7% para 2025 y de IPC + 1,75% para 2026 y una política de trabajo decente que quedó consignada en el Plan Distrital de Desarrollo, política que deberá elaborarse en un término de 6 meses, priorizando la provisión oportuna de vacancias, la reducción progresiva de contratos de prestación de servicios y el aumento las plantas de personal.
También se logró que la Administración Distrital se comprometiera a presentar un proyecto en el Concejo de Bogotá para reducir la dispersión salarial en niveles asistenciales, técnicos y profesionales, beneficiando a ciertos cargos con un aumento de grado e ingresos. Además, hubo acuerdos sobre la formación y vinculación de personas con discapacidad, los permisos remunerados, el aumento en fondos educativos y para juegos deportivos, entre otros.
CEDESIP: El CEDESIP acompañó movilizaciones convocadas por ustedes en la bancada sindical unificada en medio de esta negociación, ¿Podría hablarnos sobre cómo fue esta negociación y qué considera fue lo más difícil en el proceso?
BC: El tema más difícil en la negociación fue el incremento salarial, donde surgieron las principales tensiones con la Administración Distrital. Aunque la ciudad presenta unas finanzas estables y un aporte positivo de los sectores público, salud y educación al PIB de la capital, la propuesta salarial inicial de la administración fue de solo 0.5%, que llegó a 0.8% tras las movilizaciones, y esa propuesta parecía inamovible.
Ante esto, convocamos a un plantón unitario con el apoyo de diversas organizaciones sindicales y la presencia de directivos nacionales de la CUT. Esta movilización fue clave, ya que rompió el estancamiento en la negociación y permitió avanzar hacia un diálogo más fluido. La movilización demostró la unidad y fuerza de la bancada sindical. . No me canso de decirlo, la movilización es el único camino para conquistar derechos.
Junto a las movilizaciones, realizamos asambleas informativas, campañas de agitación y propaganda, y en la mesa de negociación argumentamos con datos sobre la estabilidad financiera de la ciudad, el impacto de las alzas de combustibles y servicios públicos en costo de vida, y las prioridades de gasto de la Administración.
CEDESIP: ¿Qué enseñanza le queda al sindicalismo tras esta negociación?
BC: Dos enseñanzas clave: la primera, la necesidad de actuar unitariamente en defensa de los intereses de los trabajadores. Aunque en la bancada había organizaciones sindicales con diferentes visiones, supimos priorizar lo que nos unía. La segunda, mantener la independencia y autonomía sindical en la negociación. Aunque el trato fue cordial con la Administración, nunca perdimos de vista que representamos a los trabajadores, y la distancia que debemos tener con quien funge como nuestro patrón no es sólo evidente, sino necesaria.
CEDESIP: Beto, nuevamente gracias, es un verdadero honor contar en el equipo con dirigentes sindicales como usted. Para finalizar, ¿qué mensaje le daría a los jóvenes que están entrando al mundo laboral o que ya pertenecen a una organización sindical, o que están pensando en involucrarse en temas sindicales?
BC: En este país, hacer sindicalismo es muy difícil. Las formas precarias de contratación, que son una regla en el mercado laboral, eliminan la estabilidad y, con ello, el derecho a sindicalizarse. Además, hay una cultura antisindical muy fuerte, donde la organización de trabajadores no es valorada como una conquista de la democracia, sino vista como un problema.
Este país tiene una deuda histórica con sus trabajadores, en gran parte por malas decisiones económicas y políticas. Y los jóvenes lo tenemos aún más difícil. El desempleo juvenil está 7 puntos por encima del promedio general, y para las mujeres jóvenes llega al 24.4%. Nuestra generación enfrenta la precarización laboral, con contratos tercerizados, órdenes de prestación de servicios y mucha informalidad, lo que complica la sindicalización y la negociación.
A los jóvenes les digo que merecemos un cambio real, y para lograrlo hay que luchar. Mi invitación es que se afilien a las organizaciones sindicales, participen y contribuyan a fortalecerlas. Además, deben formarse, aprender de quienes tienen más experiencia. Esta es mi segunda participación como negociador de la CUT, y estoy agradecido por el apoyo de dirigentes experimentados, quienes son un ejemplo para seguir.